Reconocer la importancia de promover y valorar la diversidad de expresiones culturales como un instrumento para el fomento de la cohesión social que fortalezca el desarrollo económico sostenible y contribuya a la reducción de la pobreza entre nuestras naciones. Reafirmamos el papel esencial de la diversidad cultural como fuente de creatividad e innovación, así como motor en la generación de empleo.